jueves, 24 de marzo de 2016

DESDE MI VENTANA, 76


LA VIRTUD DE LA HUMANIDAD



El aumento de la especie humana y el desarrollo económico sobre la Tierra tiene un límite. Aquí no cabemos todos y, menos aún, si todos lo queremos todo. 

 El espacio no aumenta y lo que ofrece la Tierra, los recursos naturales, lo que hay, son habas contadas. O se reduce el número de habitantes para que pocos consuman cada vez más, o se rebaja el promedio del consumo para que llegue a todos por igual lo que se ofrece. Bajo tales supuestos, solo es posible crecer ya en bienes inmateriales: en sabiduría y en virtud, en solidaridad y en justicia , en paz y libertad, en la humanidad que nos hace humanos. La alternativa a esa virtud de la humanidad que no ocupa lugar ni explota la Tierra, es la barbarie que nos embrutece y todo lo consume.

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