martes, 9 de febrero de 2016

NO TE ENROLLES

HAY QUE ABRIRSE


-No es lo mismo abrirse que salir corriendo.
-El que sale corriendo huye, y sale como una bala hasta meterse en otro agujero.

-El que no se abre se encierra sin escapar del agujero y el que huye va de mal en peor. -Un hoyo cerrado es una fosa , como una casa sin puerta ni ventana.
- Solo el que se abre se libera: se levanta y anda, como Lázaro.
- Abrirse es salir, y el que se abre un caminante.
- No es lo mismo largarse que largar: largarse es salir de aquí, del rolde. Y largar es enrollarse.
- El que solo se larga no se enrolla, ni se compromete. Puede salir a dar una vuelta por ahí o salir por peteneras de la situación: estar ausente o en la higuera.
- El que se enrolla tampoco está en el mundo, está en el rollo: más que largarse, larga demasiado. Y sin dejar de hablar, se queda solo.
- Aquí es el lugar de la responsabilidad. Solo el que está aquí esta en el mundo.
- La gente anda siempre por ahí, nunca está donde hace falta. Solo las personas, cada una en su lugar, están aquí: en su sitio, donde se las puede encontrar.
-Solo las personas son responsables. Nadie está aquí sin estar a la vez en todo y para todos.
- Enrollarse, largar, largarse o salir corriendo...es desentenderse. Y desentenderse es entenderse mal. Como se entienden los desentendidos, que son también los desatentos. -Una persona atenta y responsable no se enrolla ni sale corriendo, sale con un pie en tierra y otro el aire hacia delante: al encuentro del otro, de todos los otros y del otro de todos nosotros.
- De una situación confusa y de un mundo mundial como botella agitada no se sale sin salvar las diferencias: hacia delante.
-Distinguiendo primero, respetando, y acordando después: pasando de la hostilidad a la hospitalidad, y de la hospitalidad a la apertura del camino que se hace al andar y que solo se cierra por detrás.
- Que no tenemos aquí ciudad permanente ni el camino es lugar para quedarse, compañeros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario