Apenas terminado mi artículo sobre Obama y la Puerta de Bandeburgo, me entero de lo que está pasando en Brasil y traduzco unos párrafos de un artículo publicado al respecto en DER SPIEGEL ON´LINE (22.6.2013) por J. Weinreich. Es posible que Obama no pueda derribar otros muros, pero cuando se cierra una puerta también es posible que se abra otra si nosotros queremos. Ese es el problema Y el tema es lo que transcribo seguidamente:
"Panem
et circeneses" es una fórmula clásica para tener éxito
en la política, por eso los gobernantes se han procurado siempre el
favor del pueblo organizando grandes eventos deportivos. No obstante
al enteramos hoy que en el país más fanático del fútbol que hay
en el mundo la gente se manifiesta y sale a la calle de pronto
para protestar contra el abuso de ese deporte nacional, habrá que
decir con claridad: Nada será ya como antes! [...]
"Lo
que está sucediendo estos días en Brasil es algo absolutamente
nuevo e imprevisible para quienes promueven esos eventos. Por vez
primera se rebelan quienes deberían costear el campeonato
mundial de la Fifa (y también los Juegos Olímpicos de verano para
el año 2016). Y con ellos los futbolistas. " La Selección es
el pueblo", ha dicho Luiz Felipe Scolari , y "Nosotros
somos el pueblo". Scolari es el entrenador nacional de Brasil ,
pero él y sus "estrellas" se han unido a los que protestan
en las calles en vez guardar silencio sumisamente" [...]
"Hace
años en Leipzig gritaron también 100.000 manifestantes: "Nosotros
somos el pueblo" Y dos días más tarde cayó el Muro y, con él,
un dictador que había abusado siempre del deporte para hacer
propaganda del régimen".
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